Es muy común que en los viajes a los bebes y niñas/niños que están ubicados en el sistema de retención infantil (sillita o butaca) se les caiga la cabeza hacia adelante, y que esto nos preocupe.
Por eso algunas personas, probablemente con buena intención, fabrican y venden estas vinchas. Sin embargo, no deberíamos usarlas, pues SON PELIGROSAS.
El sistema de retención infantil está diseñado para ser seguro por si mismo, SIN NINGUN AGREGADO. En un accidente, el impacto sobre la cabeza del bebé es atenuado en parte por la silla: estas vinchas dificultan esta acción, y además pueden causar asfixia al quedar encima de la cara, o estrangulamiento al quedar en el cuello.
Si tu bebé es menor a 3 meses y se le va la cabeza hacia adelante, para evitar la asfixia postural se puede reclinar hacia atrás la silla lo más que lo permita; ajustar bien al bebé a la silla (se suele dejarlo muy suelto) para que no resbale; y viajar por periodos cortos, parando cada hora y media aproximadamente.
Si tu bebé es mayor a 3 meses y tiene ya control cefálico, NO HAY RIESGO de que la cabeza quede hacia adelante durante los viajes dado que ya tiene mayor madurez para mantener libre la vía aérea. Sirve reclinar la butaca y ajustarlo bien; y, por supuesto estar atentos y vigilar al bebé o niño/niña.
Siempre leer el manual de la butaca y evitar los “agregados”, como estas vinchas, fundas o forros de cinturones que no vienen de fabrica. ¡Pueden ser contraproducentes!
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