Pegar para que aprendan a no pegar, lastimar para que entiendan que hicieron algo mal, «Lo pellizco para que sepa que eso duele y no lo vuelva a hacer». O sea, enseñamos a no pellizcar… ¿pellizcando?
Crianza con amor
El chirlo es un golpe. Es alguien que tiene todo el poder del amor (porque aunque nuestro niño o niña se esté retorciendo a los gritos, nos ama con toda su alma) y seguramente, creyendo que hace lo mejor, ejerce su superioridad golpeando un cuerpo pequeñito.
Es un golpe, y no importa que sea «suavecito», o «sobre el pañal». Violentamos a otra persona que nos tiene como ejemplo, por ende, crecerá creyendo que golpear está bien.
¿Usted le pegaría un chirlo a su compañero de trabajo cuando se equivoca?; ¿Y a sus padres? Seguramente no.
Entonces, ¿por qué nos parece correcto pegarles un chirlo a los niños?