Verano y mosquitos: cómo usar el repelente

Luego de hablar sobre las picaduras de mosquitos muchos de ustedes me consultaron por el uso del repelente. A continuación, toda la información.

En el 2016, ante la epidemia de dengue, la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) modificó sus recomendaciones acerca del uso de repelentes en niñxs.

Recomendaciones sobre el uso de repelentes

• Se aconseja su uso a partir de los 2 meses de vida.
  
• El repelente recomendado es el DEET (dietiltoluamida), siempre que la concentración del químico no sea más de un 30%. No hay ningún producto en el mercado que supere el 25%. Las marcas más comunes son OFF verde y naranja, Fuyí y Coalix (este último dato que me paso una seguidora. GRACIAS). Se pueden usar cualquiera de estos productos desde los 2 meses.
  
• También hay opciones que tienen otro repelente, la icardina. Se puede utilizar en gel a partir de los 6 meses; y en spray, a partir de los 2 años.
  
• El repelente se pone después del protector solar (se pone protector y se deja secar, y arriba va el repelente). Si tenemos ropa, por ejemplo manga larga, se pone encima de la ropa, no por debajo
  
• Se coloca en las manos del adulto y luego se pasa por el cuerpo del niño o niña, excepto zonas que se chupen (manos, pies). Cuando se aplica en la cara, no tocar ojos ni boca. Es indistinto usar crema, gel o spray. Si usamos este último, también hay que ponerlo en las manos del adulto para pasarlo.
  
• Usar repelentes a base de citronella (una planta muy piola que repele el mosquito) no ofrece la protección adecuada, sobre todo ante el mosquito del dengue ya que se empieza a ir el efecto a los pocos minutos de colocarlo.
  
• Renovar el repelente de acuerdo a su potencia. Por ejemplo, el OFF naranja se renueva cada 3/4 hs; y el verde puede aguantar hasta 6 hs. Aunque sean necesarios en esta época de dengue, estos no dejan de ser químicos así que se sugiere lavar la piel antes de acostarse y no dormir con el producto puesto.
  
• Las pulseras repelentes y los botones ultrasónicos no tienen efectividad y no están recomendados. Se pueden usar los dispositivos con pastillas o líquidos antimosquitos en las habitaciones desde que el bebé es recién nacido.